Suponiendo que el infierno se desate, y nuestro mundo pase por una catástrofe nuclear, ¿crees tener los recursos necesarios para sobrevivir al caos predominante? Bien, si dispones de US$ 3 millones de dólares extras por ahí y no tienes planes para invertirlos, te es posible comprarte un pequeño espacio en un condominio de lujo a pruebas de “apocalipsis” ¿Qué te parece?
Según lo publicado por Liz Moyer en The Wall Street Journal, el primer complejo de este tipo se construyó en los alrededores de la ciudad de Concórdia, en el estado de Kansas, y el éxito resultó tan avasallante que, tras su lanzamiento en diciembre de 2012, todos los apartamentos quedaron con sus respectivos dueños en menos de un año. En la actualidad, otro condómino está siendo construido, y existe la posibilidad de que más unidades se pongan a disposición del público en Texas y en otros estados.
Anti apocalipsis
Estos complejos se edifican al interior de antiguos silos nucleares capaces de soportar el ataque directo de bombas nucleares. La estructura tiene más de 50 metros de profundidad y 15 metros de ancho, y cada piso cuenta con un área útil de aproximadamente 170 metros cuadrados – se ofrece la posibilidad de que un solo departamento ocupe todo el nivel o que el área se divida en dos unidades.
Para que a los ocupantes no les surja la sensación de claustrofobia, los apartamentos tienen 2.72 metros de altura, una sistema de iluminación que imita la luz natural y, en lugar de ventanas, las unidades tienen instaladas pantallas de video que reproducen desde paisajes naturales a escenarios urbanos – a elección del comprador. Además, el complejo cuenta con área de spa, biblioteca, tienda de conveniencia, teatro, academia, gimnasio, instalaciones médicas y permite que los residentes puedan tener mascotas.
Autosuficiencia
En la superficie térrea, los condominios pueden sellarse a través de dos puertas blindadas que pesan más de tres cuartos de tonelada cada una, y cada complejo cuentan con estructuras sofisticas para el tratamiento del agua y la purificación del aire, cámaras de seguridad internas y externas, una avanzada red informática de última tecnología y varios generadores alternativos de energía.
Aún hay más, los condominios cuentan con sistemas de acuicultura y cultivos hidropónicos donde se podrán producir algunos alimentos, en complemento con el almacén de comidas deshidratadas y congeladas lo suficientemente abundantes como para mantener a los residentes bien alimentados durante cinco años. Los proyectistas incluso designaron un espacio para apartar a los ocupantes que causen problemas.
Emprendimiento centralizado en el miedo
Conocido como Survival Condo, cada complejo puede albergar hasta 75 personas y, además de los cómodos apartamentos y demás facilidades, en caso de emergencia, el condominio ofrece un transporte blindado a cualquier lugar en un perímetro de 645 km, así como servicio armado de “protección”.
Uno de los compradores – un empresario tabacalero que mantuvo el anonimato – pagó US$ 12 millones de dólares por cuatro pisos completos. Según los proyectistas, la idea era tener espacio suficiente para acomodar a la familia entera y unos amigos en caso de que el apocalipsis llegara. El empresario también contrató un diseñador para decorar los apartamentos con más ventanas, chimeneas y muebles finos.
Los emprendimientos de este tipo están enfocados en ciudadanos acaudalados que viven con un sentimiento de amenaza constante. Según los responsables, esta sección del mercado creció bastante en los últimos años – especialmente tras los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, y el miedo por la seguridad viene siendo alimentado por la amenaza de epidemias mortales, por el fortalecimiento del Estado Islámico en Irak y por el repunte de la crisis económica mundial.
Disiochita :*