Desde mayo del 2014, tres mujeres que fueron víctimas de la red de prostitución que operaba al servicio de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre en las oficinas del PRI capitalino, presentaron sus denuncias formales ante la Procuraduría General de la República (PGR), una de las cuales ya fue turnada a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).
A Gutiérrez de la Torre, Valentina, Renata y Beatriz, lo acusan de los delitos de trata de personas y delincuencia organizada, ya que una de las víctimas, Valentina, fue privada de su libertad por más de dos horas en una de las oficinas del PRI-DF que se localizan sobre la calle Puente de Alvarado, colonia Guerrero.
Valentina, Renata y Beatriz gozan de un acuerdo de reserva de identidad autorizado por la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) de la PGR, por lo que se trata de nombres ficticios con los cuales rindieron su testimonio ante un fiscal de la Unidad Especializada en Investigación de Tráfico de Menores, Personas y Órganos (UEITMO).
La denuncia de Valentina fue presentada ante la SEIDO el 13 de mayo del 2014, apenas 42 días después de que Noticias MVS diera a conocer el testimonio de la reportera infiltrada que entró hasta las oficinas que tenía Gutiérrez de la Torre en el PRI capitalino, por lo que pudo grabar a una de sus enganchadoras, Claudia Priscila Martínez González, audios que se transmitieron en Noticias MVS el 2 de abril del 2014.
Renata y Beatriz presentaron su denuncia contra Gutiérrez de la Torre ante la SEIDO a principios del mes de junio del 2014. Las tres víctimas del caso tienen como representante legal a Teresa Ulloa, presidenta de la Coalición Regional Contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y El Caribe (Catwlac, por sus siglas en inglés).
Por primera vez y ante la posibilidad de que la Procuraduría General de Justicia del DF intente cerrar la indagatoria contra Gutiérrez de la Torre, Ulloa Ziaurriz revela a Noticias MVS la existencia de estas tres denuncias que se habían mantenido en sigilo con el fin de proteger a las víctimas y evitar que sean intimidadas por colaboradores de Cuauhtémoc Gutiérrez, como le ha sucedido a ella desde que decidió asumir el caso.
Además, Ulloa solicitó al Procurador Rodolfo Ríos Garza que envíe el caso a la SEIDO, con el argumento de que se cumplen con los supuestos previstos en la Ley Federal de Delincuencia Organizada, es decir, que hay una acción concertada de al menos tres personas para cometer un ilícito.
Esas personas serían Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre y sus enganchadoras para la red de prostitución, Sandra Esther Vaca Cortés y Claudia Priscila Martínez González.
“La primera es una denuncia de Valentina, la otra es de Beatriz y la siguiente es Renata. Solicitamos en junio del 2014 al Procurador General de Justicia del DF que se declarara incompetente en virtud de que pudimos probar que hay más de 3 personas involucradas en la red de prostitución que operaba en el PRI-DF y que había una estructura jerárquica. Ríos Garza no contestó, mandó a la Fiscal de Asuntos Electorales y Especiales a que nos contestara, pero ella contestó sin fundar ni motivar”, denunció Ulloa.
De las tres denuncias que existen contra el ex Presidente del PRI-DF, Cuauhtémoc Gutiérrez está al tanto de una desde octubre del año pasado, aunque todavía no la ha reconocido públicamente, ya que siempre ha negado la existencia de víctimas.
La abogada Teresa Ulloa explica que Gutiérrez de la Torre conoció la acusación de Valentina por una filtración de la Procuraduría capitalina, filtración de que la responsabiliza al Ministerio Público encargado del caso, ya que dicho servidor público ha tratado de interceder a favor del político priista que conserva su influencia en la estructura de ese partido político.
“El hecho es que ahora me di cuenta, en la última comparecencia que hice, de quién está filtrando información y es el Ministerio Público, que inclusive, me dijo que el señor Cuauhtémoc decía que no me conocía, que él respetaba mucho el trabajo de las organizaciones que defendían a las mujeres y que era mejor que ya se archivara el asunto, cosa que obviamente me parece una falta de ética y por la naturaleza de nuestra organización, no vamos a traicionar a las víctimas, ni vamos a negociar”, advirtió.