Vesna Vulović (nacida el 3 de enero de 1950) es una ex-azafata de las líneas aéreas serbias. Pero se preguntaran ¿que tiene de especial esta mujer? pues nada mas y nada menos tiene el récord del mundo, según el Libro Guinness de los récords, como la persona que ha sobrevivido a una caída libre desde mayor altura: 10.160 metros
Los hechos ocurrieron el 26 de enero de 1972, sobre Srbská Kamenice en Checoslovaquia (actualmente República Checa), después de que el avión que efectuaba vuelo 367 de la compañía JAT Airways, en el cual Vulović era azafata de vuelo, se partiera en dos. El informe oficial de la comisión de investigación checoslovaca, que fue entregado a la OACI el 7 de mayo de 1974, determinaba que hubo una explosión en la parte delantera del compartimiento de equipaje del avión. El servicio secreto checoslovaco, encargado de la investigación, presentó partes de un reloj con alarma diez días después del accidente, determinando que provenía de una bomba. El informe concluyó que el avión fue destrozado por esa bomba.
La azafata de 22 años Vesna Vulovic en el momento de la explosión se encontraba en la sección de cola del aparato. La parte trasera del avión permaneció intacta e hizo las veces de salvavidas al golpear la pendiente nevada y llena de árboles de una montaña en un ángulo favorable.
Según el informe oficial, la explosión partió en pedazos el McDonnell Douglas en pleno vuelo, y Vesna fue la única superviviente. Se dijo que sobrevivió porque estaba en la parte trasera del avión. Sin embargo, Vulović afirma que se encontraba en la sección central, a la altura de las alas. Eso coincide con lo que declaró Bruno Henke, el hombre que salvó la vida de Vesna, sacándola de los restos del fuselaje...
Vulović siguió trabajando detrás de un escritorio en las oficinas de la compañía JAT Airways después de la plena recuperación de sus lesiones, que incluían una fractura de cráneo, dos piernas rotas y tres vértebras rotas, lo que la dejó temporalmente paralizada de cintura para abajo. Después de operaciones de cirugía, recuperó la movilidad de las piernas, y comenzó a volar esporádicamente. Vulović afirma que no tiene miedo a volar, lo que atribuye a la pérdida de memoria tras el accidente, y que incluso disfruta viendo películas de catástrofes aéreas. Es considerada una heroína nacional en toda la ex-Yugoslavia.
Vulović fue premiada con el Récord Guinness, cuyo galardón le entregó Paul McCartney en una ceremonia.
Vulović fue despedida en 1990 por realizar críticas al presidente yugoslavo Slobodan Milošević. Después, participó en las protestas contra su gobierno, incluida la Revolución Bulldozer, que llevó a su derrocamiento. Muchos creen que su condición de heroína nacional impidió a las autoridades detenerla. Sigue participando en la política en Serbia, y es una defensora del presidente Boris Tadić