MÉXICO, D.F. (apro).- Un día antes de que le aplicarán la inyección
letal, Edgar Tamayo escribió una carta póstuma en la que pide a las
autoridades hacer hasta lo imposible para evitar que otros compatriotas
mexicanos que se encuentran en el corredor de la muerte corran la misma
suerte que él.
En la misiva enviada a la agencia EFE en El Paso,
Texas, el morelense agradeció “su buena intención a quienes me
apoyaron”, y pidió: “ojalá lo sigan haciendo con mis compañeros”.
Tamayo,
cuyos restos llegarán esta noche a Miacatlán Morelos, demandó que se
exija al Consulado de México en Houston que vele por las necesidades de
los hombres sentenciados a la pena de muerte y de sus familias, “sin
esperar a que tengan una fecha de ejecución para intervenir”. En
su misiva, con fecha 21 de enero, Edgar lamenta que se le acabara el
tiempo para responder las cartas que recibió, y subraya que días antes
de su ejecución decidió que no quería testigos.
“De testigos no
quiero a nadie, eso es muy feo, pregúntale a Sandra (su abogada) cómo se
siente ser testigo. Yo quiero que me recuerden todos contento y, como
dice la canción de Pepe Aguilar, RECUÉRDAME BONITO y no acostado y atado
como perro, y no quiero que nadie me mire así, ni siquiera mis
abogadas”.
Añade:
“No voy a contestar todas mis cartas. Ya
no tengo tiempo. Si acaso perdemos, por ahí déjales saber a quienes me
apoyaron que les doy las gracias, y que me perdonen por no haber
contestado, pero no hay nada que hacer, ya no hay tiempo, por lo pronto
me despido de ti”.
Subraya:
“Sé que los designios de Dios son misteriosos, pero a veces me gustaría que nos ayudara a entenderlos un poco más”.
Y
puntualiza que su experiencia en el corredor de la muerte “no puede
entenderse desde la lógica humana, pero yo sé que (Dios) tiene un plan
maestro y sé que algo bueno puede venir de lo que vemos como malo. Pero
aun así”.
Este viernes la secretaria de Desarrollo Social de
Morelos, Adriana Díaz Contreras, confirmó que hoy llegará el cadáver de
Édgar Tamayo al municipio de Miacatlán, nueve días después de que fuera
ejecutado en Estados Unidos.
El consulado mexicano, dijo, se hará
cargo de la logística y el costo que implica el traslado de los restos
del connacional condenado a la pena capital por el asesinato del policía
Giy Gaddis, en 1994.
Según información emitida por el consulado,
el cadáver –que viene acompañado de la hermana de Edgar, Alma Tamayo–
saldrá alrededor de las 17:46 horas de la ciudad de Houston, Texas, en
el vuelo 1092 de la empresa United Airlines, y arribará a la Ciudad de
México minutos después de las ocho de la noche.
Posteriormente la
funeraria García será quien lo lleve hasta el municipio de Miacatlán,
ubicado al sur del estado de Morelos, donde arribará aproximadamente a
las 12:00 de la noche.
De acuerdo con Díaz Contreras, el gobierno
del estado se hará cargo de los gastos funerarios en ese municipio,
donde sus vecinos, familiares y amigos lo esperan para realizar un
cortejo fúnebre en cuanto arribe el cadáver.
La funcionaria
estatal confirmó que este itinerario ya se hizo del conocimiento de la
familia Tamayo, por lo que ya se hacen los preparativos para recibir el
cuerpo en Miacatlán, además de que se ha dispuesto de todo el apoyo del
estado para que no haya contratiempos en el traslado del cadáver y el
funeral.
Pobladores y familiares de Édgar Tamayo han adelantado
que en la entrada del municipio estarán esperando los restos para, desde
ahí, partir en cortejo fúnebre hasta la casa de sus padres. Justo en la
entrada de este lugar hay una manta colgada, donde se establece la
consigna: “Edgar inocente”.
Luego de difundirse el contenido de la
carta de Tamayo, el secretario de Relaciones Exteriores, José Antonio
Meade, dio a conocer que el gobierno mexicano ha impedido la ejecución
de 852 mexicanos sentenciados a muerte a Estados Unidos.
Edgar Tamayo, sentenciado a pena de muerte de EU. |