Apuesto lo que sea: hay un par de cosas que te encantaría que los hombres hicieran por sí solos. Cosas que simplemente te harían feliz, solamente si ÉL las hiciera SIN tener que decírselo.
Para darte la oportunidad, otra vez, de cambiar la perspectiva y poder ver todo desde el punto de vista masculino me gustaría explicarte hoy tres sencillos puntos que a los hombres les encantaría que una mujer supiera:
1) Un piropo es un regalo para ti
Cuando él te dice algo bonito, te hace un piropo, es obviamente desagradable que le cuestiones este piropo. La mayoría de las mujeres reaccionan a un piropo (sin querer) despectivamente infravalorándolo o rechazándolo.
Él: “¡Qué sonrisa tan bonita tienes!”
Tú: (de repente abandonas la sonrisa y miras insegura al suelo) “Sí bueno, mis dientes estaban antes mejor, la semana que viene tengo un cita con el dentista, vamos a ver qué encuentra esta vez…”
Cuando los hombres ofrecen un piropo a una mujer, lo hacen para expresar su aprecio. Para hacerle sentir bien. Como probablemente sepas, los hombres rara vez reparten regalos.
Un bonito piropo es uno de los mayores regalos que un hombre puede darte.
Imagínate que le preguntas a un nuevo conocido si le gustaría volver a verte, (con ello le estás echando un piropo, expresas tu aprecio), él desvía su mirada y contesta:
“No sé todavía, la semana que viene tengo mucho trabajo. Pero podemos llamarnos por teléfono…”
Huyyyy…
Este es JUSTO el sentimiento que le das cuando desprecias o relativizas su piropo. Yo sé, que lo haces por modestia y porque “no llevas demasiado bien los piropos”.
Bueno, él ya no te llama porque de alguna manera tenía “una extraña sensación”. Y –por supuesto- porque ahora mismo está REALMENTE estresado.
Así simplemente no vamos a ningún sitio…
Hacia un piropo masculino (siempre que no sea ofensivo sexualmente o impertinente) deberías reaccionar de la siguiente manera:
- Sonríele
- Mírale fijamente a los ojos
- Di solo una palabra: “¡Gracias!”
- RÍETE
No desprecio, no rechazo y tampoco un “Ya lo sé, me lo dicen mucho…”.
Solo la modesta palabra llena de encanto “Gracias”.
Y en el fondo ya SABES que con este piropo él tiene razón y te ALEGRAS por ello. Así ya se establece una unión emocional con él, puesto que él siente que has aceptado su regalo y lo aprecias. Créeme ¡este pequeño detalle puede tener mucha fuerza…!
2) Muestra tu enfado con la misma intensidad que tu alegría
Para los hombres es obviamente frustrante cuando una mujer no toma en cuenta las cosas que él hace para intentar hacerla feliz. Tu enfado con respecto a un comportamiento “equivocado” lo demuestras muy claramente. Eres totalmente visceral cuando él hace algo que NO te gusta.
Cuando te muestras furiosa, por celos o por su comportamiento inadecuado, él se pregunta “¿Por qué no se mostró así de emocional (en sentido positivo), cuando planeé nuestra excursión para el fin de semana?”
Por supuesto no tiene que gustarte su egoísmo y su desinterés continuamente, sin embargo deberías mostrar tus emociones con la misma intensidad cuando él hace algo bien. De lo contrario, su sentimiento hacia ti puede convertirse en el típico destructor de relaciones:
“No se puede hacer nada para que esté contenta…”
3) Él NO puede leer los pensamientos
Él es un hombre. Esto significa que le cuesta muchísimo descubrir el significado de las afirmaciones femeninas. Él habla y entiende un idioma que se compone sobre todo por afirmaciones CONCRETAS. Ya Sigmund Freud, el creador del psicoanálisis, dijo en la etapa final de su vida:
“La gran pregunta que a pesar de haber estudiado durante treinta años la psicología femenina no he podido responder es: ¿Qué es lo que quiere realmente una mujer?”
Cuando ella le dice algo a él por disgusto o rabia, él considera sobre todo sus emociones. Cuanto más cargada de sentimientos es la afirmación de ella más significado tiene para él.
Así lo interpreta él:
“Ella muestra emociones. Esto indica sobre todo algo que no le parece.
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- Significado: ella no es feliz conmigo.
- Significado: antes o después me dejará.
- Consecuencia: voy a invertir menos sentimientos
en esta mujer y me dedico mejor a otras cosas”.
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Como puedes comprobar, son estos básicos malentendidos entre hombre y mujer el desencadenante verdadero de todos los dramas pasionales que se suceden diariamente en todas partes. El culpable no es Él, tampoco lo es ELLA, es simplemente el hecho de que solo hablamos otro idioma.
Bien, ¿qué significa esto exactamente? Cuando estés molesta o furiosa por su comportamiento (algo totalmente normal y que pertenece irremediablemente a toda relación), tienes que asegurarte de decirle CONCRETAMENTE lo que te molesta. Intenta hablar algo más lento y más suave, como normalmente hablarías. Sobre todo habla EN PERSONA con él, no por mensajes, emails en los que te descargas. Él entenderá estos “emails de reclamaciones” SIEMPRE de otra manera a la que pretendes, créeme.
Asegúrate de que él ha entendido de verdad de qué se trata. No creas que “él ya debería saber lo que piensas”. Piensa en esto: ¡él no es una mujer!
Justo así deberías aceptar y negar CONCRETAMENTE lo que te gusta o no de él. Él entiende poco de “se entiende por sí solo”.
