martes, 14 de mayo de 2013

Stalker


Soy de las que piensa que las redes sociales son un must y que, usadas adecuadamente, son una herramienta extraordinaria. ¿A qué me refiero? Bueno, a que en general acercan a la gente. En mi caso, que tengo amigas repartidas por todo el mundo (es lo malo de estudiar fuera), ¡es lo máximo! Porque mínimo me entero que a una ya le dieron la ciudadanía americana, que a la otra le acaban de dar el anillo en este instante, que una más anda de viaje en Francia y que otra por ahí está organizando un curso de yoga en la playa (al cual quizá me apunte).
Anyways, cuando las usamos para sacar a la detective que llevamos dentro, pueden ser un gran fiasco porque pueden ser terriblemente engañosas. De hecho, piensa: ¿cuándo te tomas fotos y las subes? A menos que seas reportera social, por lo general es únicamente en ocasiones especiales, con amigas que casi no ves. No hablas de tu vida diaria, común y corriente, sino de los highlights que te interesa recordar y compartir… o presumir, en el peor de los casos.
Ahora, habrá quienes me digan que Googlean con fines de saber más sobre el individuo. Mmmhh. 50%-50%. Repito: si dudas de su identidad y  entonces sí saca la lupa. Pero si es un ser bastante común, con el que trabaja tu amiga, que sabes que sí existe y así se llama, pues relájate. Recuerda que convertirte en stalker es un arma de dos filos. Por un lado puedes pensar ‘ay, yo estoy mejor que esa niña con la que sale en todas las fotos’, pero por otro lado te puede causar muchas inseguridades y llevarte a asumir, pensar y suponer cosas que en realidad no existen.






                                                                               Cortesía de la adicta al feis

No hay comentarios.:

Publicar un comentario