Aceptémoslo, todos en algún momento de
nuestra infancia o pubertad intentamos comunicarnos con algún ente
sobrenatural (el diablo, un demonio o algo así). De forma inocente realizamos juegos que nos hacían pensar que alguien del más allá tenía las respuestas a cualquier pregunta. ¿Te acuerdas? A continuación te vamos a mostrar algunos de los juegos diabólicos que seguro jugaste de niño.
Los lapiceros
Para este juego se necesitan tres
lapiceros colocados en las manos de los jugadores: dos verticalmente
(uno en cada mano) y el tercero en forma horizontal. Para iniciar el juego debes hacer una
pregunta, si el “ente” sobrenatural quiere comunicarse contigo, los
lapiceros verticales empezarán a moverse formando un triángulo. Puedes preguntar cualquier cosa, si los lapiceros no se juntan, la respuesta a tu cuestión es “no”.
El libro rojo
Se trataba de un juego bastante simple donde sólo tenías que seguir cinco reglas:
- Tener un libro con portada roja.
- Encender una vela roja.
- Formular una pregunta en voz alta, con los ojos cerrados y colocando la mano sobre el libro también cerrado.
- Sin abrir los ojos, debías abrir el libro y señalar un punto, éste sería la respuesta a la pregunta.
- Si la respuesta tenía coherencia, el juego había empezado.
La Ouija
Este juego quizá no es tan inocente
como los anteriores, quizá no todos los niños o adolescentes lo jugaron,
pero muchos sí lo hicieron. La Ouija es un tablero con números y
letras. Su objetivo es entablar comunicación con seres que no pertenecen
a este mundo. El tablero se mueve después de formular una pregunta, la
cual es respondida por las fuerzas sobrenaturales.
Bloody Mary
Este es uno de los juegos más
populares del mundo. Lo único que necesitas es prender dos velas frente a
un espejo y pronunciar tres veces el nombre “Bloody Mary”. Inmediatamente aparecerá una mujer frente a espejo (lo cual no sé si es cierto, ya que nunca lo intenté).
¿Cuál jugaste tú? ¿Recuerdas otro juego diabólico?
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